Según la IDF (International Diabetes Federation) en el 2021, once de cada 100 personas adultas tiene diabetes, y cerca de ellos, la mitad no tiene idea que ya padece esta enfermedad.
La diabetes es caso serio, una de las principales causas de ceguera, insuficiencia renal, ataques cardíacos, accidentes cerebrovasculares y amputación de miembros inferiores. Las personas con diabetes tienen más riesgo de enfermar de gravedad y morir por otras enfermedades (como el doble de riesgo de morir por COVID-19 y triple riesgo en cáncer)
El problema se agrava cuando el numero de diabéticos se ha multiplicado tanto (se estiman 1,300 millones de personas para el año 2050, el doble que la actualidad), que los suministros de insulina son insuficientes, ya que los sistemas de salud hoy no pueden costearlo
La tasa de mortalidad por diabetes aumentó 70% a nivel mundial, y en América provoca casi la mitad de las muertes prematuras.
¿Cómo es que una enfermedad NO CONTAGIOSA crece tan rápido entre la población?
Pareciera que la industria alimenticia juega en contra, cuando la oferta de productos nocivos, lejos de disminuir, crece en los anaqueles.
Debemos estar alertas y decidir de forma consciente tomar acciones para alejarnos del riesgo de caer en esta enfermedad y sus consecuencias:
A) Revisar los ingredientes en alimentos procesados, en especial por los azucares escondidos bajo otros nombres (sacarosa, fructuosa, dextrosa, maltodextrinas, jarabe de maíz, sirope de agave, polialcoholes) y evitarlos.
B) Evitar alimentos sin Fibras (jugos de fruta, arroz blanco) y productos de harinas refinadas (pan blanco, cereales procesados)
C) Evitar el consumo de tabaco (dejar de fumar reduce el riesgo entre 30 y 40%)
D) Mantener actividad física regular
E) Mantener un peso corporal saludable recomendado a tu estatura
¿Qué más puedo hacer?
Se han escrito docenas de artículos que describen como los altos niveles de estrés oxidativo y daño por radicales libres aumentan el riesgo de complicaciones en el diabético como retinopatía diabética, (enfermedad ocular), nefropatía (enfermedad en riñones), hiperlipidemia (elevación de colesterol), neuropatía periférica (daño nervioso) y obesidad mórbida.
Docenas de estudios han demostrado que Mantener niveles saludables de GLUTATION (el antioxidante maestro) ayuda a disminuir notablemente el estrés oxidativo y sus consecuencias.
El Glutatión (GSH) en la Diabetes:
La sangre y tejidos de los diabéticos están marcados por niveles de Glutatión críticamente bajos, esto favorece un alto estrés oxidativo que contribuye a las complicaciones diabéticas y a que sean personas mas propensos a infecciones.
El Glutatión mejora el Sistema Inmune, reduciendo el riesgo de las infecciones.
Tiene un papel como protección antioxidante para el revestimiento de las arterias, y en mantener niveles saludables de colesterol
Los nefrólogos e investigadores japoneses han demostrado propiedades protectoras contra el daño renal
La neuropatía diabética se correlaciona con estrés oxidativo, y bajos niveles de glutatión, los estudios muestran mejora en los síntomas cuando se restauran niveles adecuados de glutatión.
La insulina en la sangre hace que las células sanas absorban la glucosa (azúcar). Los diabéticos resisten la influencia de la insulina, poniendo a sus células bajo una doble amenaza:
– Primero, las células carecen de azúcar porque la glucosa no entra en la célula.
– Segundo, el azúcar se acumula en la sangre a niveles intolerables.
Si esta resistencia a la insulina pudiera superarse un poco, más azúcar se aprovecharía por las células que la necesitan y habría menos acumulación en sangre.
Hay una correlación entre la resistencia a la insulina y la disponibilidad de Glutatión.
Mantener niveles saludables de Glutatión
No es tan simple como solamente comerlo, ya que se destruye durante el proceso digestivo; eso nos lleva a buscar precursores (los bloques necesarios para que tu cuerpo lo produzca), de los cuales el que más hace falta, es la cisteína, que lamentablemente corre la misma suerte de ser destruida por la digestión.
Las investigaciones rindieron fruto al descubrir un precursor que puede aportar cisteína en una forma consolidada o protegida que puede ser asimilada en el proceso digestivo y efectiva para elevar el nivel de Glutatión.
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